“Tribute to…”
¿Homenaje o negocio?

Allá por comienzos de los años Noventa, una nueva moda se impuso en el mundo musical: los álbumes de tributo, onda que pegó muy fuerte, sobre todo, en el ambiente country. ¿Por qué? Quizás una de las explicaciones sea algo que ya he mencionado en un artículo anterior: el respeto que el público country le tiene a aquellos intérpretes del pasado, o yesteryear, razón por la cual, muchos artistas septuagenarios pueden, noche a noche, seguir presentándose en escenarios dando conciertos, ya sea en el Grand Ole Opry, en la estación de radio de Ernest Tubb o en alguno de los muchos teatros de la ciudad de Branson, en Missouri. Esta reverencia del público por esos artistas veteranos que de una manera u otra significaron un momento importante en el mundo de la Música Country y en el suyo propio, fue entonces explotada por productores quienes, con intenciones de variada índole, decidieron lanzarse a rendir tributo a cuanto veterano aún estuviera vivo…o no.
Para comenzar a armar un album de tributo, no hay que esforzarse mucho en el título: casi todos se llaman “Tribute to…” o “The Songs Of…” y se rellenan los puntitos con el nombre del homenajeado de turno. Cuanto más veterano sea este homenajeado, mejor, y si realmente su contribución a la música fue importante, mejor todavía. Lamentablemente, algunos de estos homenajeados brindaron tanto al mundo musical que ninguno de los tributos existentes le hace verdadera justicia, tal como atestiguan los cds dedicados a los gigantes Bill Monroe o Elvis Presley.
En un cd de tributo, se encuentran intérpretes de variados estilos, aunque en general sean artistas de country, de rock y también de blues. Esto significa que los resultados también sean muy heterogéneos, e incluso se encuentre en uno de estos tributos, a algún artista invitado que quizás jamás en su vida haya oído hablar del homenajeado y cayó allí sólo porque le conviene profesionalmente. En otros casos, por el contrario, el que un artista ajeno al género country haga un enfoque personal de algún clásico del homenajeado, puede significar una lectura fresca y revitalizante de la canción. Los cds Grievous Angel (tributo a Gram Parsons) o Timeless (a Hank Williams) incluyen interesantes versiones que si bien no son country, son buena música se mire de donde se mire. Esto entonces habla muy bien del compositor homenajeado: si una canción suya permite múltiples y variadas versiones, significa que es lo suficientemente rica como para trascender las barreras de un género específico. Kristofferson es un tipo que ha probado esto, con composiciones que han sido grabadas por artistas tan distintos como Tina Turner o Frank Sinatra. Un grande, el Kris, realmente.
Siguiendo con la selección de intérpretes, muchas veces la variedad de artistas, aún siendo todos ellos country, es de estilos muy disímiles, y hace que las canciones suenen tan distintas que no parecen haber sidas compuestas por el mismo compositor y el resultado pierde su rumbo.
Las rencillas, envidias y disputas entre sellos discográficos juegan también a veces una mala pasada: en muchas ocasiones se han grabado cds de tributo “con lo que hay”, o sea con los artistas que determinado sello tiene disponibles, y a veces muchos de esos cantantes son realmente olvidables. En otros momentos, determinados sellos no permiten que sus artistas participen en un album grabado por otro sello –problema que se soluciona en muchas oportunidades con un cartelito que reza “XXX appears courtesy of YYY Records” y punto. Para el tributo a Bob Wills que Ray Benson organizó con su grupo Asleep At The Wheel, Benson logró conseguir una impresionante lista de intérpretes de primera línea y quiso además la participación de Mary Chapin Carpenter. La cantante-compositora del sello Columbia estaba encantada con la invitación, pero sus jefes –y dueños de su contrato- no le permitieron sumarse al homenaje. “Es una lástima” dijo Benson, “Mary Chapin podía haber incursionado en un estilo (Western Swing) que le es ajeno y creo que hubiera sido bueno para su imagen”. Por supuesto que lo hubiera sido, pero lamentablemente, sus ciegos y necios jefes de Columbia Records se dieron cuenta de ello sólo luego de que A Tribute To The Music Of Bob Wills And His Texas Playboys fuera un masivo éxito de crítica y de venta. Hoy en día, Mary Chapin Carpenter, con su popularidad bastante venida a menos, aparece en cuanto cd tributo puede. Demasiado tarde, nena…
Los tributos que mejor funcionan son, indudablemente, aquellos que son organizados por un músico o cantante, que realmente ama a su ídolo a homenajear, lo conoce y ha estudiado su música a fondo y sabe darle al cd una coherencia musical. El tributo a Bob Wills antes mencionaodo y su secuela, Ride With Bob, también dirigido y producido por Ray Benson, son claros ejemplos. Otras joyas por el estilo son A Kindred Spirit, un tributo a Johnny Cash producido por su ex-yerno y eterno admirador y amigo, el genial Marty Stuart; Big Mon, dirigido por Ricky Skaggs, casi hijo adoptivo de su ídolo Bill Monroe y Grievous Angel, homenaje a Gram Parsons, dirigido por su eterna enamorada, Emmylou Harris. E infaltable en cualquier colección country es Caught in the Webb, tributo al legendario Webb Pierce, plasmado por la impresionante cantante/compositora Gail Davies seguida por una legión de amigos del Country Alternativo.
En el otro extremo del espectro se encuentran aquellos tributos que nunca debieron haber existido, como por ejemplo Not Fade Away: Remembering Buddy Holly, Skynyrd Frynds, Stone Country o Common Thread: The Songs of The Eagles, este último increíblemente premiado por la Country Music Association como Album del Año, quizás porque fue uno de los primeros y representó cierta novedad.
Y por supuesto, existen esos álbumes individuales en los cuales, un determinado artista ha realizado su propio tributo a otro: Jerry Lee Lewis a Hank Williams, Merle Haggard a Bob Wills y Elvis Presley o más recientemente Charley Pride a Jim Reeves o Pam Tillis a su papá Mel.
La siguiente es una lista con breves comentarios de algunos de los cds de tributo que más resonancia tuvieron –para bien o para mal- en la última década.

Asleep At The Wheel: A Tribute to the Music of Bob Wills & The Texas Playboys.
Espectacular cd de Asleep at the Wheel con innumerables invitados especiales; puro Western Swing para amantes del country, el jazz y el blues. Imperdible y uno de los mejores cds de los Noventa.

Asleep At The Wheel: Ride With Bob.
¿Las segundas partes nunca fueron buenas? Este cd prueba lo contrario: los artistas que quedaron fuera en el primero se pelearon por estar en este, y se esforzaron en crear música maravillosa, con el sello de Bob Wills y Asleep at the Wheel.

Big Mon: The Songs of Bill Monroe.
Buen tributo de Ricky Skaggs, con John Fogerty, Mary Chapin Carpenter, Charlie Daniels, Joan Osborne y el siempre eficaz Travis Tritt, entre muchos otros. Buen resultado general.

Caught in the Webb: A tribute to the Legendary Webb Pierce.
“Webb Pierce era la antítesis del country moderno” dice la productora/cantante/compositora y fan Gail Davies en la introducción al cd, y la elección de artistas del movimiento Country Alternativo y de veteranos del más puro country es más que eficaz: Charley Pride y George Jones junto a Allison Moorer, Robbie Fulks, Dale Watson, Joy Lynn White y otros. Una joyita.

Come Together: America Salutes The Beatles.
Buen comienzo con magistral versión de “I’ll follow de sun” a cargo de David Ball, se disuelve luego en baladas insípidas y temas sin imaginación. Sin embargo, brillan Willie Nelson, Delbert McClinton, Phil Keaggy y Suzy Bogguss.

Common Thread: The Songs of The Eagles.
Uno de los primeros cds de tributo, resulta aburrido y sólo Travis Tritt, Cliint Black y John Anderson salen airosos; los otros artistas, aunque muy talentosos, no logran nada interesante.

Dressed in Black: A Tribute to Johnny Cash.
Un regalo de los rebeldes alternativos al rebelde mayor: Hank III, Robbie Fulks, Raúl Malo –de Mavericks-, Chuck Mead –de BR549 y productor de este cd-, Rodney Crowell, Kelly Willis, Mandy Barnett y otros en sentidas y exquisitas versiones de clásicos cashianos. A conseguirlo ya!

Get Rhythm: A Tribute to the Man in Black.
Curioso tributo de artistas mayoritariamente europeos que imitan sobre todo al Cash de Sun Records. Realmente interesante, pero al mismo tiempo uno se pregunta ¿para qué escuchar a imitadores cuando puedo escuchar al verdadero?

Hank Thompson and friends
Realmente aburrido, irregular y olvidable cd de Thompson cantante con varios exitosos modernos: Brooks & Dunn, Junior Brown, Vince Gill, etc.

Happy Birthday Buck! A Texas Salute to Buck Owens.
Espectacular tributo de artistas de Texas a Owens, quien si bien nació en ese estado, se mudó a California donde cultivó su sonido Bakersfield. Excelente cd que culmina con el propio Buck en vivo. Otro imperdible.

It’s Now Or Never: The Tribute to Elvis.
Grabación de parte del concierto tributo a Elvis con una excelente selección de artistas de varios géneros que renuevan los clásicos del Rey: espectaculares Tritt, Yoakam, Mavericks, Marty Stuart, Chris Isaak, entre tantos otros. Pero claro, Elvis es Elvis y sus temas y estílo son inigualables.

Johnny’s blues: tribute to Johnny Cash.
Poco conocido homenaje a Cash, pero aquí sus clásicos son realizados en versiones de blues por Clarence Gatemouth Brown, Mavis Staples, entre otros.

Kindred Spirits: A Tribute to the Songs of Johnny Cash.
Cuarto tributo a Cash, con artistas de rock, blues y country reverenciando al maestro, liderados por Marty Stuart. Cd magistral que va desde lo frenético de Yoakam, Hank Jr. o Little Richard, hasta la sensibilidad de Sheryl Crow y Emmylou Harris, entre muchos otros talentos.


Livin’, Lovin’ Losin’ songs of the Louvin Brothers.

Otro muy recomendable cd reciente ganador de un Grammy –James Taylor y Alison Krauss- en tributo a los legendarios hermanos Louvin, toda una fuerza dentro del bluegrass y folk. Además, cualquier cd producido por Carl Jackson es garantía de excelente música.

Rig Rock Deluxe: A Musical Salute to the American Truck Driver.
Esta vez los homenajeados son los camioneros y el resultado es espectacular, con temas cuya temática es la carretera, los camiones, la soledad y el alcohol. Veteranos artistas y nuevos country-rockeros se dan la mano para uno de los mejores cds de los Noventa.

Roy Rogers Tribute
Uno de los primeros tributos country –y también cds ecológicos- donde además, el propio vaquero actor/cantante interpreta clásicos con artistas exitosos en ese momento –K.T.Oslin, Restless Heart, Kentucky Headhunters- y otros inmortales –Emmylou Harris, Willie Nelson, Randy Travis-. Si bien los colaboradores vienen de estilos de country muy distintos, la voz de Rogers y los temas elegidos le dan una gran coherencia a todo el cd.

Lonesome, On’ry & Mean: A Tribute to Waylon Jennings.
Más artistas del movimiento Alt.Country o Y’Allcountry –Junior Brown, Guy Clark, Nancy Griffith, Carlene Carter, Alejandro Escovedo, etc.- rindiendo su muy buen tributo al legendario renegado, quien junto a Willie Nelson y Kris Kristofferson –también presente aquí- desafió a los poderosos de Nashville e hizo la música que él quiso. Un notable artista y un merecido homenaje.

More Songs of Route 66.
En este caso, el tributo es a la famosa ruta y el resultado es una muy buena ensalada que podría servir como banda sonora a una road movie onda Thelma y Louise. Rock, Blues y Country del mejor.

Not Fade Away: Remembering Buddy Holly.
Aburrido de donde se mire- o escuche- este cd no es rescatable –con excepción de Suzy Bogguss- ni siquiera por la presencia de los Crickets originales de Buddy Holly, incluyendo a Waylon Jennings.


The Songs of Jimmie Rodgers: A Tribute.
Conocido como el “Padre de la Música Country”, Rodgers no está tan presente en nuestras memorias como Hank Williams, ni fue tan exitoso tampoco. El resultado del tributo es muy heterogéneo, pero digno de escuchar. John Mellencamp, Bono, Dickey Betts, Yoakam, Dylan, Willie Nelson, Jerry Garcia y varios más en un cd muy acústico.

Till The Night Is Gone: A Tribute to Doc Pomus.
Pomus no fue realmente un compositor country, pero sus temas fueron grabados muchísimas veces por esta comunidad y este tributo ofrece de todo, country, rock y blues. Brillantes Bob Dylan, Aaron Neville, John Hiatt y Rosanne Cash, dentro de lo más campestre.


Mama’s Hungry Eyes: A Tribute to Merle Haggard.
Buen tributo a Hag, donde se lucen Emmylou Harris –con su Hot Band original- Lorrie Morgan, John Anderson, Diamond Rio, Radney Foster mientras otros hacen respetables versiones. Debe estar en cualquier colección country que se precie.



Pearls in the Snow:The Songs of Kinky Friedman.
Los responsables de esto deberían estar tras las rejas. Una lástima todos aquellos que brindaron sus talentos para el resultado final.

Real: The Tom T. Hall Project.
Otro grupo de Y’allternativos y sus versiones a uno de los mayores compositores del género. Kelly Willis, Mary Cutrufello, Calexico, Syd Straw & The Skeletons, en lecturas muy distintas de los originales del Storyteller, como es apodado Hall. Buena música, pero no esperen country tan tradicional como los originales de Tom T.


Skynyrd Frynds: Various Artists.
Con excepción de las colaboraciones de los Mavericks y de Sammy Kershaw, lo demás es material más bien olvidable.

Stone Country: Country Artists Perform the Songs of The Rolling Stones.
Pobre resultado que ignoró a artistas que TENÏAN que haber estado –Yoakam, Hank Williams Jr., Waylon- e incluyó otros con poca energía para versionar a los Stones –Collin Raye, Little Texas, Blackhawk-.Travis Tritt y Rodney Crowell salvan un poco el cd.

Tammy Wynette Remembered.
Correcto cd con buenas versiones a cargo de Melissa Etheridge, Rosanne Cash, Elton John y sin duda alguna, la mejor interpretación country de Faith Hill con su impresionante versión de Till I can make it on my own de la inolvidable Tammy.

The Beach Boys: Stars & Stripes Vol. 1
Buscando revitalizar su carrera, los no tan chicos playeros regrabaron sus clásicos con ayuda de famosos del country. Sorpresivamente, el resultado es más que agradable. Brillantes Junior Brown, James House y Lorrie Morgan.

The Songs of Dwight Yoakam: Will Sing for Food.
Este no es un tributo a Dwight, sino que él brindó sus canciones renunciando a sus regalías como compositor, las cuales fueron destinadas a ayudar los sin techo.. El resultado es irregular aunque por momentos original, con versiones muy distintas a los originales de Yoakam.

Tribute to Tradition
Aquí el pasado es homenajeado, como para pagar culpas y asumir lo que los nuevos artistas están olvidando: la tradición. Los mayores nombres de los 80 y los 90 le muestran a los nuevos lo que los antecesores hicieron: Dixie Chicks, Paty Loveless, Joe Diffie, Mary Chapin Carpenter, Martina McBride, Doug Stone, Randy Travis y otros versionan a Charlie Rich, Ray Price, Don Gibson, Tammy Wynette, Loretta Lynn, Waylon y otros gigantes. Otro recomendado.

True Life Blues: The Songs of Bill Monroe.
Maestros del bluegrass moderno homenajeando al padre del género. Buen resultado general, aunque un poco monótono por momentos.

Tulare Dust: A Songwriters’ Tribute to Merle Haggard.
Este tributo a Hag salió al mercado junto al otro tributo, Mama’s Hungry Eyes, pero consiste en cantantes que componen sus propios temas y homenajean a Merle de compositor a compositor. Yoakam, Iris Dement, Lucinda Williams, Katy Moffatt, Rosie Flores y Robert Earl Keen entre otros, ofrecen versiones más acústicas, más unplugged de clásicos y oscuros temas del ídolo.Interesante compararlo con el otro, aunque radicalmente distinto –y este es el preferido de Haggard-.

Podríamos seguir con algún otro cd más, ya que quedan varios en el tintero sin mencionar –Dolly Parton, Bocephus, otro a Waylon- y seguramente sigan saliendo más tributos, muchos brillantes y otros realmente olvidables.
También desde aquí, podríamos sugerir a algún productor –aunque ya se les debe haber ocurrido- tributos a Kenny Rogers, Jerry Lee Lewis, uno bueno a John Denver –existe uno acústico muy pobre-, Creedence Clearwater Revival, Carl Perkins, algún otro a Elvis, Loretta Lynn, Patsy Cline, Charlie Daniels –o al Southern Rock en general- y porqué no, así como hicieron a la tradición, alguno a los sonidos Cajun o Rockabilly o a compositores como Harlan Howard o Hank Cochran.
Veremos que nos depara el futuro.

Raúl J. Tejeiro